Sobre la entrada a cada uno de los doce templos cuelgan piezas de cristal y metal precipitado que hacen sonar las notas de los templos cuando el viento sopla moviéndolas. Una escalera circular que sube en espiral por la periferia nos lleva a la parte superior de cada pagoda. Hay rellanos en los cuatro niveles donde los tonos de los aspectos yin y yang de la jerarquía representada son emitidos. | Sobre la entrada a cada uno de los doce templos cuelgan piezas de cristal y metal precipitado que hacen sonar las notas de los templos cuando el viento sopla moviéndolas. Una escalera circular que sube en espiral por la periferia nos lleva a la parte superior de cada pagoda. Hay rellanos en los cuatro niveles donde los tonos de los aspectos yin y yang de la jerarquía representada son emitidos. |