Catorce maestros ascendidos que gobiernan el destino de América
Los catorce maestros ascendidos que gobiernan el destino de América son grandes seres de luz procedentes de la Estrella Divina Sirio, que es la sede del gobierno Divino en esta galaxia. Estos maestros han sido nombrados por Dios para dirigir el curso de los Estados Unidos de América y ayudar en el establecimiento del gobierno divino en América.
Como dice el espíritu de la libertad en estos catorce maestros ascendidos,
La victoria de los Estados Unidos no es la victoria de un país. Es la victoria de las doce jerarquías del Sol en las doce tribus de Israel que han venido de todos los países para bañarse en la llama, quienes regresarán a cada país para encender la llama y que serán para toda la gente los portadores de los fuegos de la libertad.
Que los corredores de la carrera, pues, oigan el grito de los catorce maestros ascendidos. El nuestro es un grito por la libertad a lo largo de toda Terra. El nuestro es un grito por la Madre Divina. El nuestro es un grito por la liberación de las almas de la humanidad[1].
Civilización de oro en el desierto del Sáhara
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Hace más de cincuenta mil años, en una país fértil donde se encuentra ahora el desierto del Sáhara, Saint Germain era el rey-emperador de una gran civilización de oro. Bajo su reinado iluminado toda la civilización conoció una era de paz, abundancia, logro en el comercio, la enseñanza y las artes y ciencias.
En esta era de oro, la autoridad de los asuntos de estado estaba investida en catorce maestros ascendidos, dos gobernando en cada uno de los siete rayos de la luz Crística, con catorce maestros menores a cargo de los siete departamentos de gobierno. Ningún gobierno desde entonces se ha acercado a los logros de esta administración divinamente dirigida. Durante cientos de años, la armonía entre los pueblos era la ley del país sin la necesidad de hacerla cumplir con fuerzas armadas.
El declive de aquella antigua civilización comenzó cuando una parte del pueblo se empezó a interesar más por los placeres temporales de los sentidos que por un mayor plan creativo del Gran Yo Divino. Los que gobernaban se dieron cuenta de que debían retirarse y dejar que la gente aprendiera por la dura experiencia que toda su felicidad y todo su bien provenían de la adoración al Dios interior; y que tenían que volver a adorar y servir la luz si querían ser felices. El gobernante fue instruido por un consejo cósmico para que abandonara el imperio y su gente.
El rey y sus hijos se retiraron siete días después. Un príncipe llegó al día siguiente y tomó el poder sin oposición. Dos mil años después, la mayor parte de aquel imperio se había convertido en una tierra estéril. Esta peste sobre la naturaleza fue el resultado de la discordia y el egoísmo del pueblo que había vivido ahí y que una vez fue grande.
Hoy día el pueblo de aquella antigua civilización ha reencarnado en los Estados Unidos de América. Como nación, está destinada a levantarse de nuevo, a reconocer el Yo Real interior y a restablecer una gran cultura espiritual bajo la tutela y el liderazgo de Saint Germain.
Su servicio hoy
Y estos mismos catorce maestros están aquí otra vez como los catorce maestros ascendidos que gobiernan el destino de América, y ofrecen su ayuda si tan sólo la invocamos:
¡No nos tratéis como si fuéramos de estrellas lejanas y como a parientes que vienen de visita de vez en cuando! ¡Estamos aquí! ¡Os ayudaremos respondiendo a vuestro llamado!
Recordad que cuando oímos los fíats hechos con mucha intensidad, respondemos. Pedimos refuerzos; y vosotros obtenéis la victoria. Y los caídos son derrotados completamente. ¡No tienen ningún poder! ¡No tienen ningún poder! ¡No tienen ningún poder sobre vosotros!
¡Por consiguiente, llamad al Señor! ¡Levantaos en su dominio! Y recordad que los arcángeles batallan por vosotros. No entréis nunca en confrontación directa con los extraterrestres o los caídos, mas dirigidlos en vuestros decretos hacia las huestes del SEÑOR. Esta es la fórmula, amados. Funciona. ¡Os pido por todas las evoluciones de este planeta que hagáis funcionar las fórmulas de la Gran Hermandad Blanca en vuestra vida cada día[2].
Notas
Mark L. Prophet y Elizabeth Clare Prophet, Los Maestros y sus Retiros, Volumen 1, “Catorce maestros ascendidos que gobiernan el destino de América”.