Diosa de la Paz
La Diosa de la Paz presta servicio en el Templo de la Paz, ubicado sobre las islas Hawái. Ella representa el aspecto femenino de la llama de la paz para las evoluciones de la Tierra y trabaja directamente con los elementales para infundir esa llama en la naturaleza. Da clases sobre las actividades de la llama de la paz a la humanidad no ascendida y enseña cómo mediante la devoción a la paz las personas pueden llegar a estar cualificadas para su admisión en los salones de Lúxor con el fin de prepararse para la ascensión en la luz. Sin paz no hay armonía y sin armonía uno jamás puede conseguir la entrada al Templo de la Ascensión.
Su impulso acumulado de la llama de la paz se puede invocar para aquietar las aguas de las emociones humanas, la confusión de la mente, la acción interior y exterior del cuerpo físico así como la turbulencia del mundo subconsciente. Su manto de paz debería invocarse alrededor de las madres que son portadoras de almas venideras para que estas almas se puedan sintonizar con el diseño inmaculado de su cercano destino en el mundo de la forma.
La Diosa de la Paz dice:
Amados del planeta Tierra, como tan a menudo os ha dicho Saint Germain, sólo siguiendo el camino de vuestro Yo Divino podréis jamás hallar y conocer la verdadera paz. Una miríada de ideas ha entrado, y sigue entrando, en la conciencia de los hombres, y al seguir cada una de esas ideas hasta su final último, descubren que esas ideas no proporcionan ni un ápice de felicidad permanente. La vida puede llegar a ser un abismo sin fondo de búsqueda, donde metas inferiores se buscan y se alcanzan, algunas veces haciendo daño al alma. Pero al invocar ideales de paz desde el corazón del Príncipe de la Paz y al pedir que el gobierno de la paz del cielo domine toda la Tierra, el hombre cumple las metas mayores del plan divino y satisface así sus requisitos cotidianos de servicio ordenado, amor fraternal y despliegue individual[1].
Notas
Mark L. Prophet y Elizabeth Clare Prophet, Los Maestros y sus Retiros, Volumen 2, “Paz, Diosa de la”.
- ↑ Diosa de la Paz, Perlas de Sabiduría, vol. 6, núm. 32, 9 de agosto de 1963.