Ishvara
Ishvara es una palabra sánscrita que significa «Señor del universo» o «Señor». En el hinduismo, Ishvara está considerado como el «inmediato aspecto personal de la Divinidad suprema e impersonal»[1]. No podemos conocer a Dios a menos que lo conozcamos personificado, y Dios se personifica en extensiones de sí mismo a quienes da forma espiritual y física. En realidad, sólo hay un Dios, pero el único Dios se nos aparece en sus muchas manifestaciones. Así, los múltiples dioses del hinduismo son simples rayos de luz procedentes de la única Fuente central.
La Enciclopedia de Filosofía y Religión Oriental explica que «el Dios del cristianismo y del islam, así como las deidades de la mitología hindú, son aspectos de Ishvara. Nuestra razón humana puede concebir la divinidad sólo dentro de alguna forma; así, necesitamos el concepto de Ishvara… La forma de Ishvara más diseminada en el pensamiento hindú es el trimurti, la Trinidad de Brahma, Vishnú y Shiva»[2].
Ishvara es personificado normalmente como un aspecto de esta Trinidad. Varias sectas hindúes identifican a Ishvara con la figura más elevada en su panteón, ya sea Brahma, Vishnú o Shiva. Como lo describe el sabio hindú Ramanuja, «Ishvara… posee un número infinito de cualidades supremas y auspiciosas… Posee un cuerpo de lo más perfecto, que es eterno e inmutable. Es radiante, está lleno de belleza, juventud y fortaleza. Es omnipresente; es… el gobernante interior de todo»[3]. Se puede pensar que Ishvara es uno con el gran Atmán, la Presencia de Dios que forma parte de nuestra llama trina y que está en ella.
Swami Prabhavananda y Christopher Isherwood escriben:
Lo importante es el concepto de devoción. La devoción hacia un ideal personal de Dios conlleva una inclinación natural hacia la humildad y el servicio. Si nos proponemos servir a Ishvara, si dedicamos nuestras acciones y entregamos nuestras voluntades a él, veremos que nos atraerá hacia él. Esta es la gracia de Dios, que Sri Ramakrishna comparó con una brisa que sopla permanentemente. Sólo hay que izar la vela para capturarla[4].
Durante un dictado, en 1977, Ishvara apareció en los niveles internos en una magnífica espiral de luz de filigrana cristalina como representante del hombre oculto del corazón, el Santo Ser Crístico. En aquel dictado, Ishvara dijo:
Yo soy ese, Ishvara… Estoy en la luz del Sanctasanctórum, en el interior de la llama y en la cámara secreta del interior. Venid y halladme en el centro de aquel que es vuestra vida. Venid y buscadme para conocer mi nombre y así conocer la clave interna para liberar la energía que sólo os dará vida, vida eterna[5]./blockquote>
El 30 de junio de 1995, Ishvara dijo:
Soy Ishvara. Hablo en nombre de la Trinidad hindú. Puedo ser para vosotros en un momento Padre, luego Hijo, después Espíritu Santo como está definido por Shiva. Esta llama trina que vosotros reconocéis en vuestro corazón os la represento como la encarnación divina de la Trinidad para que cuando miréis a los tres penachos veáis a Brahma en el azul, a Vishnú en el amarillo, a Shiva en el rosa.
Así comenzáis a conversar no simplemente con penachos que son llamas danzarinas, sino con la Trinidad de Dios en vuestro corazón. Este es el significado del Atmán. Este es el significado del rostro de la Madre en la esfera blanca que sostiene a la Trinidad.
Y así, dondequiera que me llaméis, dondequiera que yo esté, cuando quiera que me necesitéis, soy Ishvara. Y os proporciono una comprensión de la Divinidad que es la personalidad de Dios antes que el simple Espíritu de Dios, que muchas veces se concibe en Occidente como un vapor, algo vaporoso y algo que no se puede tocar ni adorar, quizá ni absorber y quizá ni siquiera amar.
Notas
Mark L. Prophet y Elizabeth Clare Prophet, Los Maestros y sus Retiros, Volumen 1, “Ishvara”.
- ↑ R. S. Nathan, comp., Symbolism in Hinduism (Simbolismo en el hinduismo) (Bombay: Central Chinmaya Mission Trust, 1983), pág. 13.
- ↑ Enciclopedia de Filosofía y Religión Oriental (ed. en inglés, Boston: Shambhala, 1994), s.v. “Ishvara.”
- ↑ Klaus K. Klostermaier, A Survey of Hinduism (Estudio sobre hinduismo) (Albany, N.Y.: State University of New York Press, 1989), pág. 377.
- ↑ Swami Prabhavananda y Christopher Isherwood, How to Know God: The Yoga Aphorisms of Patanjali (Cómo conocer a Dios: los aforismos yóguicos de Patanjali) (New York: Harper & Brothers, 1953), págs. 53–54.
- ↑ Ishvara, “The Quivering of a Cosmos (El estremecimiento del cosmos)”, 4 de septiembre de 1977.